Manos calientes y fuertes dispuestas a ayudar y a acariciar.
Manos pequeñas que se esfuerzan en teclear más rápido que el pensamiento.
Manos alargadas y sabias de cirujano, para las que todo es posible.
Manos de dedos delgados que esconden una valentía insospechada.
Manos rellenas, determinadas y seguras que mezclan lo mejor de nosotros dos.
Manos deformadas por la edad que cuentan cada vez más bisnietos y no dejan de enseñar.
Manos que delinean sentimientos y les dan color.
Manos llenas de pequitas que defienden un espíritu libre.
Manos de dedos pulgares anchos y sin edad, siempre dispuestas a jugar.
Manos de mujer trabajadora que existen para dar.
Manos que vencieron la enfermedad.
Manos que acarician mientras trabajan por el sustento de su hijos.
Manos que alivian y acompañan aunque no te toquen.
Manos que adivino e imagino.
Manos que amo.
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